Ford Explorer EV: El primer 100% eléctrico para Europa desde 46.600 €

Hace ya un año que Ford nos presentaba su primer coche eléctrico fabricado en Europa y para el mercado europeo: Ford Explorer EV. Un modelo que llega para complementar al Mustang Mach-e en la gama 100% eléctrica de la marca y que inicia la electrificación definitiva del fabricante en Europa. Este coche, un crossover de 4,46 metro de largo y planteamiento claramente familiar, comparte la plataforma MBE con los modelos eléctricos del Grupo Volkswagen. Se acaba de poner a la venta en España a un precio de partida de 46.600 euros, incluyendo la campaña de lanzamiento.

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Y sí, efectivamente, se llama Explorer, como el Explorer actual, que es un enorme todoterreno híbrido enchufable, último integrante de una larga saga de grandes SUV americanos y con el que, marca aparte, este nuevo Explorer no tiene nada que ver. Bueno, en realidad sí, porque Ford ha decidido cambiar de estrategia y, aunque este nuevo Explorer solo se venderá en Europa, este coche busca reivindicar el origen americano de la marca y confirmar que Ford mantiene su apuesta por Europa. La marca, al contrario que General Motors, que se fue con su música a otra parte en 2019 cuando le regaló Opel a PSA, seguirá en Europa y lo hará con modelos 100% eléctricos.

Este coche se ofrecerá en dos variantes de acabado, Explorer y Explorer Premium, con cambios en elementos como el tamaño de las llantas o el equipamiento, y no puede negar la influencia en su diseño del Explorer que tantos años lleva fabricándose en Estados Unidos. El frontal, por ejemplo, es contundente, con un morro muy alto y plano, muy cúbico en definitiva y sin parrilla como corresponde a los eléctricos.

Lo más sorprendente es que el logo es ahora muy grande. Ford reivindica con él un cierto orgullo y además, muestra un nuevo diseño del logotipo, eliminando el cromado en marco y grafía y pasando al blanco, más neutro. Justo encima del logotipo, una franja negra exhibe, también en negro, el nombre del modelo. Los faros son relativamente pequeños y en la parte baja, una pieza de color plata delimita la anchura del coche al tiempo que protege la parte inferior.

En el perfil destacan las formas cúbicas de la parte trasera, lo que lleva a suponer que habrá espacio suficiente detrás y un maletero aceptable. No nos han facilitado la cota de la batalla ni del resto de dimensiones (solo la longitud de 4,46 metros). El pilar delantero en negro y el trasero de cristal con un gráfico que será invisible desde el interior crean el habitual aspecto de techo flotante mientras que los pasos de rueda en negro y las ruedas grandes (con llantas de 18 a 21 pulgadas) le dan aspecto de crossover.

La parte trasera es muy compacta. Se reproduce la tira negra con el nombre del modelo y los pilotos se desplazan hacia el exterior del coche para facilitar una apertura de portón lo más ancha posible. La luneta estrecha y el alerón de grandes dimensiones destacan en el diseño de la parte trasera.

Ford ha trabajado mucho la aerodinámica de este coche, con un estudio específico tanto del frontal, donde la protección delantera ayuda a generar cortinas de aire como en el diseño de las llantas, por ejemplo, que cierran aerodinámicamente el exterior de las ruedas sin afectar a la necesaria refrigeración de los frenos. Los colores elegidos por Ford además del azul Artic de lanzamiento (el del coche del vídeo y las fotos) son otro azul, un rojo, un gris plata, un negro y un blanco.

Evidentemente, aquí lo que más llama la atención es la enorme pantalla vertical de 15 pulgadas, al estilo de la del Mach-e que, además es ajustable ya que pivota 30 grados. Así, mirad. En la pantalla puede regularse el brillo, como en los móviles, tiene un menú de inicio que puede configurarse y todos los controles táctiles son de gran tamaño, lo que facilita su uso en marcha. Fuera de la pantalla se mantienen botones hápticos para el volumen del audio y los asistentes de estacionamiento, no así para la climatización, que pasa siempre por la pantalla.

Por otra parte, la pantalla esconde lo que Ford llama My Private Locker, es decir, mi taquilla privada, un espacio para guardar objetos que queda ocult0 cuando colocamos la pantalla en la posición más baja. Además, aquí debajo hay una bandea para dejar dos móviles que se recargarán de manera inalámbrica. Además, el sistema es compatible, de manera inalámbrica con móviles Android y iOs.

En la consola central tenemos un gran hueco de almacenamiento de 17 litros en la que cabe desde un portátil de 15 pulgadas a tres botellas de litro y medio. El separador podremos usarlo también como rascador de hielo y los portavasos extensibles pueden desplazarse a una zona inferior. Otros elementos que destacan en el habitáculo son la continuidad de salpicadero y puertas, la discreción de las salidas de aire, el altavoz que toma una forma similar a la de las barras de sonido de los televisores, la iluminación interior, con hasta 10 colores a elegir o la pantalla digital de la instrumentación, flotante, de solo 5 pulgadas, un tamaño muy de moda últimamente.

Los asientos llevan los reposacabezas integrados y están tapizados en un material llamado Sensico de efecto cuero en las versiones Premium. Este mismo material, que tiene un tacto mullido, se aplica a otras superficies del vehículo. Los asientos pueden ser eléctricos y con calefacción, igual que el volante.

El maletero tiene acceso mediante apertura automática y la bandeja rígida se va hacia arriba con el portón para facilitar la carga. El volumen de almacenamiento es de 450 litros y tenemos a nuestra disposición un falso piso que podemos situar a dos alturas para enrasarlo con los asientos abatidos y con el umbral de carga. Una vez abatidos los asientos traseros, la capacidad pasa a 1.400 litros.

Como en los modelos del Grupo Volkswagen que usan esta plataforma, el motor eléctrico va situado sobre el eje trasero motriz y, en el caso de la versión de tracción integral, se añade un segundo motor sobre el eje delantero. La marca ofrecerá diferentes modos de conducción: Normal, Sport, Eco, otro personalizable y un quinto para los modelos de tracción integral llamado Traction pensado para el uso del coche fuera del asfalto. Los modos modifican la respuesta del motor (más reactivo en modo sport), la asistencia de la dirección y el momento de acción del control de estabilidad.

Este coche está elaborado sobre la plataforma MBE de Volkswagen en el marco de los acuerdos tecnológicos existentes entre ambas compañías y que han dado ya vida a proyectos compartidos en el ámbito de las furgonetas o los pick-ups. Existirán tres opciones en este coche, dos de tracción trasera con potencias de 170 y 286 CV y otra de tracción a las cuatro ruedas con 340 CV.

El Nuevo Explorer puede acelerar más rápido que un Focus ST de Ford Performance, con 340 CV, lo que significa que el modelo de tracción integral puede alcanzar los 100 km/h en 5,3 segundos. El Nuevo Explorer AWD también puede remolcar hasta 1.200 kg.

Ahora, con el lanzamiento comercial está disponible la versión de autonomía extendida de hasta 602 kilómetros, con tracción trasera de un solo motor o con tracción total de dos motores, con potencias de 210 kW (286 CV) o 250 kW (340 CV), respectivamente. Más adelante estará disponible un sistema de tracción trasera con un solo motor y una batería de autonomía estándar. La batería es de iones de litio y níquel, manganeso y cobalto (NMC).

Ford habla de hasta 602 km de autonomía gracias a baterías refrigeradas por líquido con 77 kWh y 78 kWh de capacidad. La recarga podrá efectuarse a un máximo de 135 KW en una estación de recarga rápida (recordemos que Ford es una de las marcas fundadoras de la red Ionity). También puede recargarse en corriente alterna, desde 2,3 kW de un enchufe normal hasta los 11 de un wallbox. Según anuncia Ford en su último comunicado, el modelo de tracción total tarda 26 minutos 5 en recargarse del 10 al 80% utilizando hasta 185 kW de la carga rápida en CC.

Ford explica que su coche dispone de 12 sensores de ultrasonidos, 5 cámaras y tres radares para dar servicio a las diferentes ayudas a la conducción. Tiene un sistema de mantenimiento de carril que permite el cambio de carril automático en autopista para el que basta que se accione el intermitente. Añade sistema de frenado automático Stop& Go, control del ángulo muerto, adecuación de la velocidad al tráfico, con limitador, reconocimiento de señales, detección de tráfico cruzado trasero con asistente de frenada, sistema de advertencia, frenada y esquiva en caso de posible accidente, asistente de aparcamiento y aviso de presencia de ciclistas o peatones al abrir las puertas en parado. Los faros del coche son de LED matriciales antideslumbramiento.

En el equipamiento hay que destacar el acceso sin llave, el climatizador bizona, el sistema de calefacción por bomba de calor o el portón trasero de apertura eléctrica. Además, el techo puede ser de cristal con más de un un metro cuadrado de superficie acristalada.

Antes de saber sobre este nuevo Explorer EV, Ford anunció que en el año 2025 dejará de fabricar y de comercializar el Focus. Aquí tenéis la razón. Este coche, que mide menos de 4,50 metros y que convivirá con él un par de años, debe terminar por sustituirle. La marca avanza hacia la electrificación y a este nuevo Explorer le seguirá un nuevo crossover deportivo que se producirá en la misma planta y con la misma plataforma. En Colonia, la marca ha invertido 2.000 millones de euros para adaptar la planta a la electrificación y ha construido una fábrica de baterías anexa que empezará a producir en 2024.

Ford ya ha anunciado que solo venderá turismos eléctricos en nuestro continente en 2030 y después de la avanzadilla que ha supuesto el Mustang Mach-e, este Explorer es el inicio del camino definitivo de la transformación de la marca en un fabricante 100% eléctrico.

Ford ha anunciado el inicio de las ventas de su nuevo Explorer EV coincidiendo con la llegada de la aventurera Lexie Alford al final de su viaje de 30.000 kilómetros al volante de este nuevo coche eléctrico. Ha logrado el récord oficial de ser la primera persona en circunnavegar el globo al volante de un vehículo eléctrico con el nuevo Ford Explorer totalmente eléctrico.

El precio de la versión con autonomía extendida parte de los 46.600 euros (precio con campaña de lanzamiento). Más adelante, estará disponible una versión con batería de autonomía estándar cuyo precio será confirmado posteriormente. Los descuentos son de 5.200 euros para las versiones RWD y de 2.900 euros para las de tracción total AWD, por lo que el precio de inicio se queda en 46.600 euros: Aquí tienes los precios PVP máximos recomendados, sin los descuentos:

• Ford Explorer EV Rango Extendido RWD 77 kWh 210 kW (286 CV): 51.765 €

• Ford Explorer EV Rango Extendido AWD 78 kWh 250 kW (340 CV): 58.755 €

• Ford Explorer EV Rango Extendido RWD 77 kWh 210 kW (286 CV) Premium: 54.785 €

• Ford Explorer EV Rango Extendido AWD 78 kWh 250 kW (340 CV) Premium: 61.775 €

*Noticia actualizada por Sara Soria. Primera publicación 22/03/2023